Sunday 31 October 2010

Portland

En la universidad de Portland, Oregon Health & Science University (OHSU, pronúnciese owechesyu) tienen un departamento que se dedica a temas de reconocimiento de voz, el OGI. Pues en este departamento está trabajando Maider, así que no podía recorrerme medio Estados Unidos sin visitarla.

La ciudad
El autobús llego tempranito por la mañana, todavía era de noche, pero como ya funcionaba el transporte público fui a coger el tranvía que me llevaba a casa de Maider. La parada del tranvía estaba a unas cuatro manzanas de la estación de autobuses. El camino estaba lleno de mendigos y vagabundos, especialmente al lado de la parada del tranvía, que había una casa de acogida. Además la parada estaba debajo de un puente... Yo creo que estaban todos. En seguida me di cuenta de que ellos iban a su bola, así que decidí ir a la mía y no hubo ningún problema. Además, como yo también llevaba mochila pasaba desapercibido. Para integrarme del todo me faltaba el carrito de la compra atestado de cosas.

El único momento en el que utilicé la guía fue para ver el camino a la parada del tranvía. a partir de que llegué a casa de Maider la guardé en un cajón y le deje que hiciese el papel de guía. El único momento en el que no le dejé decidir fue al salir del brunch, que justo dejó de llover un momento y me dijo que podíamos ir andando. Y mira que por lo general no me importa andar, pero es que ese día entre el frío y la lluvia, y llevando ya cinco minutos esperando al autobús, pues no me pareció la mejor opción.

Lo malo de poner el piloto automático es que no prestaba mucha atención a orientarme, así que yo veía sitios y calles pero no sabía situarme muy bien, pero bueno, algo si puedo contar. Es la ciudad con estilo más Europeo de las que he estado. El transporte público te permite moverte con relativa facilidad; aunque en ciudades grandes como Nueva York es normal moverse en transporte público, en ciudades del tamaño de Portland parece ser que es de agradecer. Aun así el coche viene bien; en Nueva York por ejemplo es más bien un trasto inútil que solo viene bien cuando sales de la ciudad (cuando sales mucho de la ciudad) y que encima tienes que pagarle un alquiler.

La primera noche subimos a un hospital. Era curioso, porque la planta baja del hospital estaba en un noveno piso (o una cosa así). Según parece primero hicieron el edificio principal, luego otros edificios, y poco a poco los han ido uniendo. como está en una colina pues al unir con los edificios que quedaban por debajo ha terminado teniendo unas cuantas plantas por debajo de la planta principal. Otra cosa curiosa de este hospital es que está abierto al público. Puedes entrar en el como Pedro por su casa, lo cual está muy bien porque te permite disfrutar de unas vistas espectaculares de la ciudad sin tener que dar explicaciones a nadie.

Por lo demás la ciudad no tiene nada que llame mucho la atención; casas residenciales, edificios altos, tiendas, bares y cafeterías, un río con once puentes y vistas al monte Hood, que no llegué a ver, no sé si por las nubes o porque no me fije bien.

La gente
Aunque no hubo gente del albergue a la que conocer, si conocí a un montón de españoles que andan por esas tierras. Es lo que tienen tener conocidos en una ciudad, que ellos también tienen conocidos. La mayoría trabajan en Intel o en Iberdrola, que tienen oficinas allí. Pero yo en eso no me metí mucho y me interesé más por su vida fuera del trabajo. Vamos, que quedamos para tomar una birras.

Está bien, porque así conoces el tema de las Happy Hours, que es lo que hay que buscar para comer barato en Estados Unidos. También me explicaron que en Portland hay un montón de cervecerías, pero de las que hacen su propia cerveza (breweries). Como aquí se lleva mucho el tema de las franquicias le expliqué a Maider que teníamos que elegir una brewery de esas y montar una cadena para forrarnos. Desgraciadamente alguien se nos ha adelantado.

Un tal McMenamins se ha dedicado a comprar todo tipo de edificios antiguos que iban a demoler (estos estadounidenses como no tienen historia les da igual seguir sin tenerla) y reformarlos. El viernes estuvimos en un antiguo instituto. En una parte tenía un hotel con piscina, en otra un cine y varias clases habían sido convertidas en sendos bares (cada vez que oigo/leo la palabra sendos,as me acuerdo de Zipi y Zape. Pero a pesar de leerlos de crío, hasta hace bien poco no me he enterado de que significaba exactamente. ¡¡¡Y ahora, por fin, la puedo usar en un texto propio!!!). Un sitio curioso. El sábado, esta vez solo con Maider, estuve en otro algo más modesto, ya que solo tenía bar y cine. De todas formas esta franquicia no ha llegado a Europa, así que nos podemos dar prisa. La idea es montar una cadena de Irlandeses pero que hagamos nuestra propia cerveza y poner un cine al lado (también sirven hoteles y otro tipo de espectáculos). Nos podemos organizar en los comentarios, pero no lo montéis sin mí...

Con los españoles en Portland también tuve la oportunidad de ver la típica casa de Estados Unidos. Lo mejor el sótano; claro que tiene que ser un sótano como el de Flanders, porque como sea como el de Homer...

No tuve la ocasión de profundizar mucho en la gente de Portland, pero algo me quedo claro: "Portland is weird" (Portland es extraño). Y no sólo porque lo diga la gente y porque vendan pegatinas con la frase e invitando a seguir manteniéndolo así, sino porque se ve. Aparte de la gente rara que se ve por la calle (que podría dar para un montón de mini-secciones "Personaje más friki", había tiendas de ropa rara. Lo bueno de estas tiendas es que con colgar un cartel de "Hallowe'en", ya está, ya tienen una tienda de disfraces. Estaban llenas, y en una había un tipo con un sombreo con forma de pollo que a todo el mundo le soltaba la misma chorrada: "¿Te gusta mi pollo?... No es un pollo, es mi sombrero (es posible que haya cambiado el orden de los factores, pero aun así tampoco le encuentro el sentido...).

Pero lo más raro de la gente rara de Portland es que hicieron un desfile de zombies. Primero se reúnen todos en la plaza central de Portland y con la canción de Thriller hacen una coreografía. Para todos los que había bastante bien sincronizados. Luego, aunque esto ya no lo ví, me lo contaron, se dedican a ir por las calles de Portland en plan zombies. Claro, como son zombies no piensan mucho, y no tienen ningún tipo de cuidado; van todos en manada, saltándose semáforos, subiéndose por los coches, papeleras y demás. Tiene que ir la policía cortando el tráfico para evitar incidentes. Eso sí, los maquillajes muy currados. Esto lo hacen todos los años, y aparte tienen otro desfile que van vestidos de papanoeles, otro que van vestidos de emperador-con-traje-nuevo y creo que me dejo otro.

Lo que he aprendido
Que en Estados Unidos también se hacen horas extras, aunque por lo menos las pagan al doble que allí.
También me acabo de enterar de que la palabra tropecientos realmente existe.

Lo bueno
Después de tres semanas viajando sin saber muy bien donde vas a dormir, que vas a comer o con quien vas a coincidir se agradece estar con alguien conocido. De todas formas debió de suponerme un shock, porque la primera noche me desperté completamente desorientado sin saber donde estaba. En seguida me acordé que estaba de viaje y pensé que estaba en un albergue, pero eso no cuadraba con la habitación donde estaba. al final ya me ubiqué del todo. Aunque me ha pasado varias veces eso de despertarme sin saber muy bien dónde estoy nunca me había pasado con tanta intensidad. Fue algo raro.

En cualquier caso muchas gracias a Maider por haberme acogido y haberme enseñado la ciudad. Ya nos tomaremos unos talos con sidra en Santo Tomás.

Lo malo
Se nota que he subido al norte, porque el tiempo ha sido bastante malo. Ha hecho frío y a llovido bastante, así que no he podido disfrutar de la ciudad al máximo. Por lo que me ha dicho Maider en verano no llueve nunca pero en invierno no para. Así que si os pasáis por aquí elegid bien las fechas.

El personaje más friki
Esperando al tranvía para ir a casa, mientras caía el diluvio, aparecen tres tipos que también querían coger el mismo tranvía. Lo primero que hicieron fue avisarnos de que estaban INTOXICADOS (vamos, con un pedo del copón). Luego nos empezaron a contar su vida. Uno tenía un hijo de dos años al que le llevaba una espada de juguete. Además estaba esperando otro crío. Los otros eran sus cuñados, es decir, los hermanos de la mujer. Resulta que la mujer era la hermana número 16, y nosotros tuvimos el honor de conocer a los hermanos 15 y 17. En total tenían unos 70 sobrinos. Decían que tenían alojamiento disponible en toda la costa oeste. al final, tras pedirnos perdón tropecientas ocho veces se despidieron. No llegaron a la fase de exaltación de la amistad.

Friday 29 October 2010

Boise

Boise es otra ciudad de esas que ha recibido mi visita por estar en la mitad de camino a mi destino, en esta ocasión Portland. De hecho boise además ha necesitado el hecho de tener una gran comunidad de vascos, porque sino me hubiese ido directo a Seattle, a visitar a Boeing (que luego me he enterado que se ha mudado a chicago) y a Microsoft. Pero seattle tendrá que esperar...

La ciudad
Tengo que comentar que antes de llegar a Boise el autobús pasó por Twin Falls, otra localidad del estado de Idaho. En esta localidad pasamos por encima del río Snake, que cuenta con el cañón más profundo de Estados Unidos. Aunque el punto por el que cruzamos el río no era ni mucho menos el más profundo, si que se veía un cañón típico, es decir, con paredes verticales y el río en el fondo. Desgraciadamente no hay fotos, estaba en el autobús y bastante que lo ví...

A boise llegué por la noche, a eso de las 20:00 y me fui al día siguiente también por la noche, sobre las 21:00. A pesar de que es tiempo suficiente para ver la ciudad, al final tube que correr para coger el autobús. Pero eso es adelantar cosas. De momento vamos con la ciudad.

La ciudad es pequeña, unos doscientos mil habitantes, aunque como todas las ciudades de por aquí es extensa; ya sabéis, casas unifamiliares... De todas formas las tres cosas interesantes para ver están en el centro, cerquita del capitolio. Al principio del viaje hubiese dicho que el capitolio también era una cosa interesante (siendo así cuatro), pero es que ya he visto tantos... El capitolio es el edificio donde se encuentra el gobierno del estado; todos los capitolios son iguales, con una cúpula por lo general de bronce, aunque creo que era el de Atlanta que era de oro. Bueno, pues las tres cosas dignas de ver son el bloque de los vascos, el bloque de las iglesias, y el cinturón verde a lo largo del río).

Lo primero que visité fue el bloque vasco, que consta de un hotel, un par de restaurantes vascos, la euskal-etxe o centro de los vasco, el museo vasco, un "boarding house", y un frontón. Un "boarding house" es la casa donde se reunían los pastores vascos cuando bajaban del monte. El museo se centra sobre todo en la vida de los vascos que emigraron a América tanto del Norte como del Sur así como a Australia, aunque los que fueron a Estados Unidos tienen un mayor peso en el museo. De todas formas no debía de ser suficiente para llenar el museo porque también han metido a Indurain, Edurne Pasaban y Severiano Ballesteros. Lo mejor del museo es escuchar a Betagarri en uno de los vídeos que ponen y lo más cansino el "Txoria txori", que se les quedó atascado el botón de repeat.

También probé los dos restaurantes. Aunque normalmente no haría esto, la alternativa era pizza, y ya sabéis lo que me pasa con la pizza, así que me atreví con el "Leku ona" para la cena del primer día. Yo pedí un solomillo y unos pimientos de Ghuernica, pero me debieron de ver cara de vasco buen comedor y además me pusieron un plato de alubias blancas y una ensalada. Me comí todo, bueno, menos tres pimientos. Las alubias estaban muy buenas y el solomillo también. Los pimientos, aunque estaban buenos tengo que decir que no eran de Guernica, ni de Padrón nin nada. Eran pimientos normales, fritos y con sal. Eso sí, un plato de doce. vamos, que no te quedas con hambre ahí. El segundo día, animado por la buena experiencia de la víspera me atreví con el Bar Gernika. Este era más tipo tasca y por lo tanto ofrecía un menú acorde: bokata de lomo con pimientos. A este le doy un aprobado justo.

El segundo día tenía un ratillo libre a la tarde, así que empecé a andar por una zona residencial y me encontré con el bloque de las Iglesias. ¿Qué es eso? Pues al parecer en Boise si quieres abrir un centro de culto ha de estar a menos de cincuenta metros de otro centro de culto, así que en un par de manzanas encontrabas la iglesia de tu confesión preferida. Para los que estén en duda viene muy bien porque según sales de una misa puedes entrar en la siguiente, ya que los horarios no coinciden.

Y por último lo del cinturón verde es un parque que han hecho a lo largo del río Boise, el que pasa por la ciudad. al parecer Boise es un nombre francés que quiere decir "los árboles". El nombre se debe a que la orilla del río estaba flanqueada por árboles así que a alguien se le ocurrió preservarlos creando un parque. Yo no lo recorrí entero, porque el río es muy largo, peor la parte que vi era muy chula. Aquí también hay una plaza-recordatorio de estas que les gusta a esta gente para Anne Frank. Aunque tiene este nombre, en la plaza se homenajea a toda la gente que ha luchado por la libertad/igualdad en algún momento, como Gandhi, Luther King y otros. Me sorprendió ver que la cita "Es mejor morir de pie, que vivir de rodillas." era de Emiliano zapata, aunque luego fue el Ché el que la popularizó. En la plaza había unas audioguías que te explicaban más cosas. Sin embargo había que darle a una manivela para que funcionasen y como que no tenía tanta curiosidad. Tengo que decir que al estar rodeada por un parque, es el primer río en una ciudad que me parece chulo. (Antes de escribir ningún comentario al respecto, fijaos en las negritas).

Por aquí cerca estaba también el campus universitario, con muchos aparcamientos y una biblioteca a la que me dio por entrar. Era una biblioteca normal, con su "drive thru" y todo.

La gente
El albergue que recomiendan en la Lonely Planet está muy lejos de todo lo que he contado antes, pero han abierto el "Idahostel" en el mismo centro de la ciudad, en la zona de bares y restaurantes. al principio me costó encontrarlo, pero tras dar un par de vueltas a la manzana me deshice de mi orgullo masculino y opté por preguntar hacer un poco de turismo por la zona decidí contrastar la ubicación del albergue con un lugareño.

El albergue estaba muy bien, nuevo y amplio. Además que la recepcionista te reciba en toalla porque acaba de salir de la ducha no tiene precio. Pero fijate que para pagar no me sirvió la Mastercard ni la Vias; me tuve que hacer una cuenta de Paypal. Creo que me podía haber quedado en un paso anterior, pero bueno, por el mismo precio. La recepcionista y el recepcionisto me dijeron que igual llegaba alguien a la noche, pero que en principio estaba solo en el albergue. También me dijeron lo del bloque vasco así que fui allí a cenar. A la vuelta me encuentro a la recepcionista con el novio viendo una película. Justo detrás mío entró al recepcionista, porque aunque me había dicho que iba a tomar unas cervezas con los colegas tubo que ir para arreglar una fuga en el baño. El tío coge un martillo y empieza a picar la pared a ver si la encuentra. Claro, como son de cartón... Yo pregunto si puedo usar el baño de tías para limpiarme los dientes y tal antes de irme a la cama y cuando vuelvo me encuentro al novio perreando a la recepcionista (entiéndase como el baile, osea, con ropa); mientras el recepcionista picando la pared. Yo digo "gudnait" y me voy discretamente a la cama.

Uno de los motivos de comer en los restaurantes vascos era ver si me encontraba con algún vasco o descendiente de vascos. En "Leku Ona" le pregunte a la camarera y me dijo que ella era americana, pero que el dueño del restaurante era vasco. Vaya, le debe ir bien, pero americanos he visto a muchos en el viaje, así que me dediqué a comer. En el bar Gernika fue peor, porque ni siquiera los dueños eran vascos, lo habían traspasado. La tía del museo tampoco tenía mucha pinta de ser vasca, aunque a esta no llegué a preguntarle. Así que yo ya estaba todo frustrado pensando que eso de los vascos era un mito cuando decido dar la última oportunidad en el "Euskal Etxe". Pero eso es lo mejor del viaje, así que si queréis saber lo que pasó tendréis que ir a la sección correspondiente

Lo que he aprendido
Confiaba en que todo el mundo fuese directo a la sección siguiente...

Lo mejor
Está uno tomandose su patxaran (por cierto, marca Baines, que luego vas a Sevilla y te ponen Zoco...) tranquilamente en el centro de vascos de Idaho cuando aparece un tipo que empieza a hablar con la camarera sobre una actuación en la que tiene que hablar en euskera. Vaya, por fin alguien de ascendencia vasca. Se llama Josu y me dice que están rodando una película en el edificio de al lado, en el "boarding house" y me invita a pasarme por el rodaje. Esto pasaba a sobre las 17:00 y el rodaje era a las 19:00, así que voy ala estación, cojo el billete a Portland, dejo la mochila en una taquilla y vuelvo al "boarding house", donde me entero de que va la cosa.

Uno de los dos hermanos de Josu está estudiando para director de cine y como proyecto final tiene que hacer una película. No voy a contar de que va la peli por no hacer spoilers, simplemente que sepáis que va sobre vascos en Idaho. Pues ahí que me dan una camisa y me dejan hacer de extra. Ya veis, la cantidad de gente que va a Hollywood a buscar un papelito en una película y resulta que el truco está en ir a Boise. El montaje final estará listo para Mayo, así que con un poco de suerte entra en el Festival de cine de San Sebastián. ¿Alguien tienen contactos?

Mientras rodaban las escenas en las que yo no salía he conocido al padre de los hermanos, un vizcaíno que lleva 35 años en EE.UU., otro descendiente de inmigrantes vascos con un euskera vizcaíno cerrado cerrado y un ingeniero informático que lleva 3 años con su propia empresa (mira, esta vez llego tarde, ha montado la empresa sin mí). Ha sido una pena que me he tenido que ir casi corriendo porque perdía el autobús, pero ha merecido la pena la carrerita.

Lo peor
Esperando al autobús había un peruano con el que he estado hablando un rato en inglés hasta que me ha preguntado de dónde era. Tras contarle mi viaje hemos terminado hablando del conflicto vasco. Menos mal que en ese momento han llamado para subir al autobús. En la cola nos hemos puesto detrás de un tipo que iba a Seattle y el peruano le ha empezado a preguntar por si le salía más barato viajar en autobús que en avión. Resulta que le salía parecido, pero debe de tener un permiso limitado o algo así que igual no le dejaban volar. Por el acento a mí me parecía yanki, así que me he perdido un poco (esto ya volvía a ser en inglés).
Pues el tipo estaba viajando de ciudad en ciudad buscando trabajo. Es ingeniero de estructuras o algo así (mechanical designer), pero al parecer con la crisis ha perdido el curro. Entonces uno se acuerda de que no todo es de color de rosa, de que la gente tiene problemas y de que tal vez este no sea el mejor país en estos casos.

El personaje más friki
Por todos es sabido la tendencía de los guiris por llevar calcetines con sandalías; es una forma muy fácil de identificarlos cuando estás de vacaciones en la playa. Si encima en vez de sandalías llevan chanclas para la piscina son más auténticos. Pero lo más de lo más es cuando ves a un especimen de estos en moto, con su casco y todo. Sorry, no hay foto porque hubiese sido muy descarado.

Monday 25 October 2010

Salt Lake city

Salt Lake City es una ciudad situada en un valle entre montañas y al lado de un lago muy salado del que recibe su nombre. El lago no está en el centro de la ciudad, hay que coger coche o autobús. Esta ciudad es famosa por los Utah Jazz, un equiop de la NBA y por ser la sede de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, los mormones para entendernos.

La ciudad
A Salt Lake City, a partir de ahora SLC, llegué sobre las 7 de la mañana. Como no estaba seguro de si me dejarían entrar al albergue o no (o si merecería la pena pasar una noche aquí), dejé el mochilón en una taquilla en la estación de autobuses y me fui a visitar la ciudad.

Como estaría todo cerrado cogí el tranvía y me fui a la otra punta de la ciudad, donde estaba el campus universitario. O se dedican exclusivamente a temas de medicina o por lo menos este área es muy importante en esta universidad, porque yo solo vi edificios y facultades dedicados a distintos aspectos de la medicina. Del campus me dirigí a unos jardines que había por la zona, pero además de tener que pagar entrada estaban en obras, así que decidí irme directamente al "This is the Place Heritage Park" ("Parque patrimonio de 'Este es el lugar'"). El nombre se debe a que el guía espiritual de los mormones, el profeta de la época, cuando huían de Iowa dijo "Este es el lugar" en el punto donde debían de asentarse. Y ahí que construyeron SLC.

En este parque hay varios monumentos a los primeros habitantes de SLC. Luego hablaré de esta gente, pero aquí me centraré en un poblado-museo que hay en el parque. Este poblado está ambientado en el siglo XIX; muchas casas son originales y otras son replicas. Te puedes encontrar la escuela, la casa del herrero, la tienda de campaña del hermitaño o la taberna del pueblo. Además en cada una de estas zonas había un actor con trajes de la época que te explicaba cosillas. Sin embargo no he visto nunca a nadie a hacer su trabajo de forma más desganada. No sé si sería porque es temporada baja o porque había poca gente o porque había un montón de niños que les tocaban las narices, pero el caso es que terminé pasando de los actores estos y visitando el poblado a mi bola. El primer actor de estos que me encotnré era un indio que te explicaba cosas sobre las casas indias; había dos tipos tipis para los nómadas y los sedentarios tenían casas de madera y adobe. era curioso que tenían casas macho, donde el chaman hacía sus conjuros, y casas hembra, donde vivía la familia. Como me parecía interesante esto de los indios le empecé a hacer alguna pregunta, pero a la segunda se puso a mirar al horizonte y dijo: "Hmmm, parece que viene otro grupo de visitantes". Yo no vi a nadie, pero pillé la indirecta y me fui camino de un barco que había por ahí.

Esta vez el actor ni se molestó en dirigirme la palabra, así que le tube que preguntar que era ese barco. Tras responderme que era un juguete le pregunté haber que hacía un barco en una ciudad que está a muchas horas de la costa (incluso ahora en coche). El tío con cara de pocos amigos me dice: "Pues no te acabo de decir que era un juguete". Y le pagan por eso, oye. A partir de aquí pasé de los actores.

De aquí me fui al centro. El centro de la ciudad es el templo de los mormones, una especie de catedral a la que no se puede entrar salvo por motivos religiosos (vamos, cerrada a turistas). Sin embargo alrededor del templo hay un par de edificios curiosos. Está el Tabernade, una capilla con una de las mejores acústicas del mundo y para demostrarlo pues nada mejor que escuchar el enorme órgano que tienen ahí. Yo como tengo muy mal oído pues tampoco noté mucha diferencia sobre mi radio de Philips, pero oye, si los expertos lo aseguran... También hay un edificio de congresos. Un par de veces al año se reunen unos 21000 mormones en este edificio. Es bastante impresionante, sobre todo porque no hay columnas (ya explican coom detŕas de la pared del escenario hay una gran estructura de hierro que aguanta todo el peso. Por último tienen la biblioteca, un edificio donde aparte de libros puedes tratar de buscar tu árbol genealógico.

La ciudad tampoco da para mucho más; de aqui me fui a comer (bastante tarde, porque me lie con los apellidos) a un italiano recomendado or la guía Planeta Solitario, pero no daban comidas, solo cenas, así que me fui al italiano de alaldo, que era un buffet donde también te daban pasta pero mucho más barato. Después me fui a buscar un albergue, porque si me pasaba otra noche en un autobús podía quedarme tan dormido que me podía pasar unas cuantas paradas.

En el albergue cogí una habitación semi-privada. Lo de privada es porque en el cuarto solo había una cama, la mía. Es que tras probar en Las Vegas a dormir solo me moló y repetí. Lo de semi era porque el baño era compartido. Y tan compartido. Lo único que separaba un inhodoro de otros era una cortinilla. Curioso. Para las duchas da igual, pero para esas cosas uno quiere un poco más de intimidad. Bueno, en la planta de abajo había otro baño un poquito más discreto.

Por cierto, si pasáis por esta ciudad y os resulta llamatiba la calle "Río Grande" os podéis ahorrar el paseillo. Solo hay un albergue para indigente con un montón de pobres por la calle. Aunque un poco más al norte hay un centro comercial para entretenerse un rato.

La gente
Al contratio que los actores del poblado-museo, que me calleron muy mal, en la plaza del templo había guías que te iban explicando todo. Estos guías son misioneros, como los que se encuentran en las ciudades de allí, trajeados, con su chapita con el nombre en el pecho y muy educados. Estos misioneros son voluntarios por un periodo de 18 meses (aunque no me cuadra tener un periodo estipulado en algo voluntario; ¿serán voluntarios para entrar pero no para salir? el caso es que a ellos se les ve felices, asñi que seguramente no se lo plantearán). A los chicos se les llama "mayores" y a las chicas "hermanas". Pues a mí me asignaron dos hermanas que me acompañaron a lo largo de toda la plaza del templo, explicandome muy bien todos los detalles, y respondiendo a todas las preguntas que les hacía. Como yo hablo castellano, pues mis hermanas eran de México y Filipinas, aunque a la de Filipinas no le hoy hablar mucho. Pero deben de tener voluntarios de todo el mundo, así que igual hasta os pueden hacer la visita en Euskera. Eso sí, además de contar aspectos históricos, muchas veces la conversación se redirige hacia tus creencias personales y al final te informan de que si quieres un grupo de misioneros de tu ciudad te pueden hacer una visita para aclarar todo tipo de dudas.Yo les dije que no y no me insistieron. En general son muy respetuosos, y en ningún momento hablan mal o atacan a las creencias de la otra persona, pero por si acaso rascan, a ver si toca. Yo la verdad es que aprendí un montón de cosas sobre esta religión.

Cuando mis dos hermanas terminaron el tour y me dejaron en uan sala de exposiciones, vi un ordenador donde podías buscar tus apellidos. En cuanto empecé a buscar aparecieron dos hermanas (una de California y otra de Illinois) y me dijeron que en otra sala me podrían ayudar más los expertos y se ofrecieron a acompañarme; más majas... sobre todo la de california. El caso es que los expertos era una señora mayor que te enseñaba a usar el Internet Explorer y el buscador de su página web. te decía todos los pasos, pero al parecer no conocía la funcionalidad del botón para ir a la página anterior, porque se desorientaba un poco cuando le daba. Para ella si había que volver atrás lo mejor era cerrar todo y volver a empezar (se lo habrá oído a algún informático). El caso es que su fuerte eran los apellidos ingleses y me invitó a ir a la biblioteca de enfrente, donde tenían departamentos internacionales. Yo entendí la idnirecta y me fui; eso sí, las dos hermanas me acompañaron. Más majas... sobre todo la californiana.

En la biblioteca me pusieron con el experto en apellidos y genealogía de España: un méxicano que en su tarjeta pone hispano-america. Pero hablaba castellano y pensaron que sería adecuado. El caso es que me dio la dirección de los mormones de Vitoria, que tienen acceso a los mismos archivos (sobre todo por lo que tienen microfilmado, porque la web es pública y si alguien tiene curiosidad le puedo dar el link, que ahora no lo tengo a mano). Bueno, por lo menos aprendí por qué tienen ese afán de buscar apellidos.

Lo que he aprendido
Como ya he señalado antes, he aprendido un montón de cosas sobre los mormones. En realidad el término crrecto es Miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y el término mormón era despectivo, aunque ahora ya no.

Esta religión la fundó Joseph Smith en 1820. Pepe tenía dudas sobre la religión y leyó en la biblia que al que le pasase esto que prguntase a Dios, que le respondería. Tengo curiosidad por ver este pasaje en su contexto, que solo te enseñan la frase. El caso es que como cabría esperar, Dios le dijo a Pepe que él era el elegido (sino no hubiese trascendido más). Así que Pepe se convirtió en el nuevo profeta, porque desde los apóstoles se había perdido ese papel en la tierra, y como profeta tenía la potestad de bautizar y hacer más cosas que hacen los profetas. Se rodeó de sus apóstoles y debieron de caer mal, porque se tuvieron que ir de Iowa y por eso terminaron en Utah.
Como desde los apostoles no había habido profetas, todos los bautizos que se han hecho hasta entonces eran falsos. Por eso su interés por los antepasados, quieren bautizarlos de la forma correcta. Además, según me explicó la hermana californiana (que maja),ellos les bautizan, pero el antepasado decide si lo acepta o no. Que considerados.
Otro aspecto curioso es que ahora siempre tienen un profeta. Hay un profeta y unos cuantos apóstoles. Cuando se muere el profeta, el apóstol más viejo se conveirte en el nuevo profeta. Yo que me imaginaba que iba a ser algo al estilo de "El chico de oro", pero se ve que esas cosas solo pasan en las pelis. Estos profetas y apóstoles pueden llevar una vida normal, tienen su curro, se casan, tienen hijos... De hecho, el tiempo que dedican a la iglesia es una tarea voluntaria. No tienen curas o sacerdotes como tal, pero si tienen líderes de la comunidad, que también son voluntarios. Bueno, por resumir todos son voluntarios.

Pero lo más curioso es lo del libro. Seguramente siempre que hayáis visto a unos misionerso de estos tuvisesn un libro: el libro de mormón. Es por este libro por lo que reciben el apodo por el que todos les conocemos. Pues este libro es una especie de Biblia o Nuevo Testamento, que complementa al anterior pero que se escribió en el contienen americano. Este libro lo escribían profetas auténticos que vivían en ese contienente, aunque el último, Moroni, enterró la última copia en algún lugar allá por el año 500 A.D. (¿se pone A.D., o D.C.?). Muy convenientemente este profeta (Moroni) se apareció a Pepe para decirle donde podía encontrar el libro. Es curioso que ya por aquellas épocas debían de tener algún medio de comunicación con el viejo contienente, c¡porque en el libro de mormón aparecen referecias a la Biblia y al Nuevo testamento. No sé como lo harían...

Lo mejor
La hermana californiana. Más maja ella.

Lo peor
El de la recepción del albergue era un tipo curioso; tenía solamente dos piños arriba y otros dos abajo. Bastante desgradable de mirar.

El personaje más friki
El de la recepción del albergue era un tipo curioso; tenía solamente dos piños arriba y otros dos abajo. Bastante desgradable de mirar. (Sí, es repe, pero me quedo sin bateria y no tengo ganas de pensar. Y hace ya cinco días de eso).


Thursday 21 October 2010

Las Vegas

No sé si sabéis que Las Vegas está en medio de un desierto. Los desiertos son esos sitios donde hay mucha arena y no llueve casi nunca; además hace mucho calor. Bueno, pues en los días que llevo en Estados Unidos ha llovido dos días, uno en Nueva York y otro en Las Vegas. Menos mal que en esta ciudad no hace falta salir a la calle, ya que puedes ir de casino a casino por tueneles, puentes e incluso trenes (aunque normalmente se hace esto para evitar los 40º que hacen en el exterior. Por lo menos, como estaba nublado, no hacía tanto calor.

La ciudad
En las Vegas hay dos calles principales: Fermont Street en el cento y las Vegas Boulevard que es perpendicular a Fermont Street. En Fermont Street han puesto una pantalla gigante cubriendo la calle a lo largo de cuatro bloques y cada hora proyectan un espectáculos de música y vídeo. Por debajo hay casinos, algún concierto y algún número de magia o similar. Pero los casinos famosos están en Ls Vegas Boulvevard. Aunque estas dos calles se cruzan, las Vegas Boulevard es muy larga y se tarda un rato en llegar. Al trozo de calle donde están los casinos se le llama de Strip, aunque por extensión ya a todo el Boulevard. Yo no he salido de estas dos calles, pero aun así me atrevo a decir que Las vegas es una ciudad muy fea. hay mucho solar vacio entre distintos bloques de casas, las calles están sucias y no tienen ningún tipo de encanto. Eso sí, los casinos son otra cosa.

Yo diría que hay dos tipos de casinos: los clásicos y los temáticos. En cualquier caso todos son hoteles con el casino en la planta baja y todos tienen algún espectaculo gratuito digno de verse. Pero los más curiosos son los temáticos. Hay un casino con los edificios más emblemáticos de Nueva York (incluso con una Estatua de la Libertad), con forma de castillo de fantasía, ambientado en las piramides de Egipto, con su esfigie y todo, en el Sáhara o en la Isla del Tesoro. Pero por lo general una vez que entras dentro son todos iguales. Pero hay dos en los que si merece la pena entrar: el y el MGM. En ambos dos hay una ciudad dento del casino con sus casitas y todo. El Venezzia incluso tiene un canal con góndolas. Pero lo que más mola de estos dos casinos es que tienen su propio cielo. Yo entré primero en el MGM, al mediodía. Pues con su cielo parecía que era un atardecer en un bazar oriental. En el Venzzia entré denoche y dentro parecía que era completamente de día. Yo creo que los dos tenían el mismo cielo, pero por la diferencia de fuera yo los percibía de manera diferente. De todas formas merece la pena darse una vuelta por todos.

En el medio de Las Vegas Boulevard está el Stratosphere. Este casino está ahí solito, sin ningún otro alrededor, pero se ve desde lejos, porque es la torre más alta al oeste del Misisipi. En lo alto de la torre hay tres atracciones poco aptas para la gente con vértigo. Yo me monté en el Big Shot. Te sientas en una especie de ascensor y te suben hacia arriba unos cuantos metros a toda velocidad. Llega un momento en que ya no ves la torre donde estabas y sólo ves Las Vegas. Recordad que ya estabas en el edificio más alto de Las Vegas y encima te han subido más y tu no ves nada debajo tuyo, sólo cochecitos pequeñitos. Encima cuando llegas arriba o cuando empiezas a caer (no lo tengo muy claro) te despegas del asiento y estás así unos pocos segundos. Esto te lo repiten un par de veces, aunque la segunda vez es menos intensa. Yo no tengo muy claro que llegase a disfrutar la experiencia. Tendría que repetir para asegurarme.

Luego por la ciudad hay alguna atracción más. Hay un simulador de caída libre y puedes recorrer la bóveda de Fermont Street en tirolina. Pero para eso ya están los parques de atracciones, así que yo me centré en los casinos. Me pasé un montón de tiempo viendo como la gente jugaba a la ruleta a los dados y al blackjack. También vi alguna partidita de Texas Holdem, pero no molaba mucho. Un tipo perdió 100$ en una sola partida a la carta más alta y mogollón de gente jugando a las tragaperras. También había salas con más televisiones que el laboratorio de Vicomtech donde podías ver (y por supuesto apostar) cualquier tipo de evento deportivo. El domingo había un montón de partidos de fútbol americano. Yo me perdía porque no sabía a cual mirar, pero la gente iba con la camiseta del equipo de fútbol de su ciudad y lo vivían.

Resumiendo es una ciudad fea a la que no creo que vuelva, pero que merece la pena ver. Yo estuve 2 noches, pero con una basta. Además, si llegas tarde por la noche no hace falta coger alojamiento para el primer día; Puedes pasar la noche en algún casino. Total no te vas a enterar de cuando se hace de día o cuando se hace de noche.

La gente
En Las Vegas me pillé un hotel, que están baratos, así que no había compañeros de habitación. La primera noche llegué sobre las ocho de la tarde, y tras dejar las cosas en el hotel me fui a ver las proyecciones de Fremont Street. A medianoche las actividades de la zona se terminan y ya solo quedan o los casinos o las discotecas, así que me fui a la Strip. Me metí en el primer casino que ví y en una mesa de Texas Holdem empecé a hablar con un tipo que también estaba mirando. Comentamos como era una mierda porque no podías echar faroles ni nada así (ver "Lo que he aprendido") y le dijimos a una de las camareras si no había mesas donde se jugase como en la tele. Cuando llegamos allí no resultó como yo esperaba, porque en la tele ves todas las cartas bien. Aquí había que estirar el cuello para ver las cinco cartas de la mesa y no veís la de los jugadores. El caso que me puse a hablar con un puertoriqueño que también estaba viendo (¡Ops! Le hice un pequeño feo al tío que me acompañó hasta la mesa) El puertoriqueño sabía todo tipo de juegos y encima iba con unos dados en el bolsillo. Estudiaba para enfermería y este también me preguntó para irse a Europa. Esto me chocó más, porque los puertorriqueños son medio yankis. Ya veis, nosotros exportamos científicos y los yankis enfermeros. También me explicó cosas sobre el black jack y lo básico de los dados y algunas cosillas de las que pongo en la sección "Lo qu ehe aprendido".

A eso de la tres decidí irme a dormir. De camino al hotel dos señoritas muy majas y simpáticas pararon el coche delante mío y se ofrecieron a llevarme al hotel. A mí me pareció un poco raro tanto altruismo, y tras una breve conversación ya me dijeron que el servicio costaba 50$, así que les dije ue daba igual, que casi estaba al lado del hotel. A la noche siguiente como llovía me fui en autobus, así que ya no tuve más contacto con este tipo de taxis. De todas formas yo creo que eran piratas o algo raro.

De todas formas, lo más divertido eran las señoras mayores jugando al black jack. Que comentarios más graciosos hacían entre jugada y jugada. Además hacían apuestas por el "dealer" (al dealer le puedes dar propina directamente o puedes hacer una apuesta por él) y cuando perdían buscaban a la camarera que te ofrece bebidas graits para tomarse un cocktail; así estaban de contentas luego.

Lo que he aprendido
Pues en Las Vegas obviamente cosas relacionadas con el juego.

De todo, lo que más me ha sorprendido es que en los casinos los "dealers" (los que reparten), no toman ningún tipo de decisión. Se dedican a sacar cartas, contar números y recoger y repartir "chips" (las fichas que luego te cambian por dinero). Yo que creía que eran una especie de gurús de las probabilidades...No les puedes tocar ni dar nada directamente. Si quieres cambiar billetes por fichas dejas los billetes en la mesa, el los coge de la mesa y los separa, supongo que para que las cámaras vean cuantos billetes hay, te dan las fichas y por último mete los billetes en una hucha que tienen. En una ocasión vi como traían más fichas a una mesa; aparece un maromo con las ficahs en una urna cerrada, le da un papelito al "dealer" para que lo firme, el maromo se queda con una copia y el "dealer" mete la otra en la hucha. Si quieres cambiar una ficha por otras de menos valor, lo mismo, dejas la ficha en la mesa y el dealer la coge de la mesa y deja los cambios en la mesa. Pero nada de tocar al dealer ni darle nada a la mano.

Las mesas están en una especie de círculo cerrado, y en el centro está el jefe de la sección. A este le tienen que decir todo lo que pasa en la mesa, como por ejemplo si alguien cambia dinero o si alguien se lleva fichas. Una vez a una "dealer" se le calló al suelo la cartulina utilizada para cortar. Esta cartulina se pone al final de la baraja al cortar para que no se pueda ver la última carta, y en el black jack con 6 barajas se pone por el final, cuando falta más o menos una baraja por repartir. Cuando sale la cartulina se aparta, pero en lsa siguiente mano se baraja. De esta forma los "contadores" de cartas lo tienen más difícil. Pues fue al apartar cuando se le cayó la cartulina. La tía apurada se lo dijo al jefe. Pero a la siguiente vez se le volvió a caer. La tía super apurada, enseñando las manos a los jugadores para que viesen que no hacía trampas y el jefe dando vueltas por detrás. Vamos, que tienen todo super controlado.

He comentado que los "dealers" no piensan, solo sacan cartas. En la caso del Texas Holdem Poker hace que el juego sea muy aburrido. Por ejemplo no vale la típica estrategía de si tienes un A y una K apostar alto para que la gente se achante, porque el dealer va siempre yu el rresto de la gente de la mesa no juega contra tí. Se juega sólo contra el dealer. Si que hay mesas para jugar contra otra gente a un Texas Holdem Real, pero no se puede ver bien y me resultaba aburrido, así que pasé del poker.

En el black jack tampoco decide nada. El dealer saca cartas hasta que tenga como mínimo 17. Si tiene 17 o más se tiene que plantar. El caso es que esto facilita los cálculos de las probabilidades y hay una estrategia que hay que seguir para garantizar perder la menor cantidad posible de dinero. Las reglas básicas:
  • Si "dealer" tiene menos de 7 plantarse con 12 o más. Esto se basa en que hay muchas cartas que valen diez. Por lo tanto si pides una carta con 12 y te toca uno de estos dieces, pues te pasas. En cambio si el "dealer" tiene seis, lo más probable es que le toquen dos diezes y se pase él. Recordad que no se puede plantar con 16 aunque tu tengas 12. Así que la mejor jugada cuando el "dealer" tenga menos de 7 es plantarse y esperar a que se pase él. A estas cartas menores de 7 se les llama "bust cards" (cuando te pasas de 21 haces un bust).
  • Si el dealer tiene 7 o más, pues hay que conseguir llegar a 17 o más. Muchas veces entra la tentación de plantarse con 16, pero las matemáticas dicen que es mejor pedir carta porque el dealer seguramente no se plantará.
  • Si tienes dos A o dos 8 hay que dividir la jugada siempre, es decir, con cada carta juegas una mano diferente. Con los ases porque te pueden tocar dos black jack, y con los 8 porque suman 16,que es la peor jugada que puedes tener, así que aspiras a tener algo mejor Recordad que da igual tener 12 o 16, ya que el "dealer" nos tiene que ganar con 17 o más; así que si tienes 12 sólo te pasas con un 9 o un 10, mientras que con 16 te pasas con un 5 o más.
  • No aceptar seguros. Cuando al "dealer" le sale un A boca arriba te ofrece un seguro. Si lo aceptas ganas si le sale balck jack, pero sino creo que pierdes. Si tu tienes black jack te ofrece darte la apuesta en 1:1; lo normal es que el blackjack se pague 3:2 (es decir, si apuestas 10 dolares ganas 15, en el resto de jugadas se pagan 1:1). Bueno, pues estos seguros tienen mayor probabilidad de que los gane la banca, así que hay que rechazarlos.
Hay alguna regla más sobre cuando doblarse o que hacer si tienes una jugada "soft" (que el A vale diez y por lo tanto no te puedes pasar si pides carta), pero esto es lo básico. Si alguien está pensando en aplicar esto en el Joker, no sirve. ¿Por qué? Porque en el Joker el camarero se va a plantar con 13 si tu te plantas con 12, el camarero toma decisiones que los "dealers" en los casinos no pueden tomar.

Por último, también he aprendido a jugar a los dados (craps). Bueno, la apuesta básica, que es apostar a que el jugador "pasa". ¿Qué es esto de que pasa? Un jugador en su turno puede tirar una o varias veces los dados. Si en la primera tirada saca 7 u 11 pasa. Si saca 2,3 ó 12 entonces no pasa (vamos, que pierde). Cualquier otro número que saque se establece como el "punto" y entonces el jugador sigue tirando hasta que saca ese número y pasa o saca un 7 y no pasa (cualquier otro número no cuenta aquí). Es por eso que el 7 a veces es bueno y a veces es malo. Luego hay muchos más tipos de apuestas, pero a tanto no llegué, porque me dio más por el blackjack a pesar de que los dados es el juego en el que la banca tiene menos ventaja. Pero el black jack (con la estrategia que he explicado) tampoco es tan desfavorable para el jugador. Los peores para el jugador son las tragaperras, aunque la ruleta tampoco es muy buena.

Lo Mejor
El último día jugue 40$ al black jack. Estuve jugando más o menos hora y media en las que a veces casi me quedaba sin fichas y otras veces casi me doblo. A la hora y media decidí que ya era momento de irme. En ese momento tenía unos 30$. Como era la última jugada, en vez de apostar 5$ como en casi todas las demás me dio por apostar 10$. Me reparten las cartas y tengo un A y un 7 y el dealer una bust card. Según la estrategía básica, lo que tenía que hacer yo era doblarme, es decir, doblar la apuesta a 20$ a cambio de recibir una y solo una carta más. Pues me toco un 2. Tenía una jugada muy buena. Al final no me acuerdo si el "dealer" se pasó o se planto con menos de 20, pero el caso es que yo gané y me fui super feliz habiendo ganado 17.5$.

Lo peor
La parte mala es que el día anterior también aposté 40$. En esta ocasión estuve en una mesa donde la pauesta mínima eran 10$. Aquí también llegué a doblarme, pero al final perdí todo en una media hora. Así que haciendo el computo global perdí 22.5$. De todas formas la forma correcta de verlo es que jugar 2 horas al black jack me costó 22.5$ y de regalo me dieron dos cervezas. Teninedo en cuenta que el Big Shot me costó parecido y fueron apenas unos segundos, el black jack no es una atracción muy cara. Pero recordad, niños y niñas, que la banca siempre gana.

El más friki
Cuando me subí al autobús para ir a Salt Lake City (SLC), de los últimos pasajeros en subirse fueron dos chicas y un chico de SLC . El chico daba miedo porque llevaba una lentilla de color blanco; parecía un Husky.
Al parecer una de las chicas, que por cierto había perdido el bolso con la documentación y el móvil en una noche de fiesta en Las vegas, había ligado con un lugareño. Cuando se subió al autobús estaba despidiéndose de él por él móvil, hablando a todo volumen, así que todo el autobús nos enteramos de que el chico estaba en una furgoneta negra detrás del autobús y posteriormente al lado. Muy curioso ver a todos los pasajeros mirando por la ventanilla. Además el conductor también hizo algún tipo de chiste, a lo que la chica sólo decía "Se están riendo de mí", pero le daba igual porque estaba super feliz enamorada de su ligue.
Pero lo mejor es que la otra chica, la amiga, ligó con un tipo del autobús que se bajaba a mitad de camino de SLC, así que fue corriendo a hablar con el conductor para ver si podía sacar su equipaje del maletero (aquí son más estrictos con los equipajes "facturados") y usar el mismo billete para coger el siguiente autobús. No sé quien me comentó algo de que las citas en Estados Unidos seguían un proceso, pero parece ser que no.

Miscelánea
Propinas
Me ha pasado algo increíble; ¡me han rechazado una propina! Como del hotel salía a mediodía y no cogía el autobús hasta la noche pregunté en recepción si podía dejar la mochila en algún sitio. Tras dejarla en un cuartucho que tenían le fui a dar un par de dolares y los rechazó. Yo tampoco insistí más.

What's up?
No lo he comentado hasta ahora, pero una cosa curiosa es que aquí vas por la calle y la gente te saluda. Igual en Nueva York no tanto, porque con tanta gente te pasarías el día diciendo "aupa", pero en ciudades pequeñas o cuando en la calle hay poca gente es la norma. Esto se aplica también a cuando vas a una tienda, que te preguntan un "How are you doing today?" (¿Cómo lo llevas hoy? o algo así) y que me recuerda al "¿Qué tal? ¿Todo bien? Me alegro. Adioz". Yo ya he optado por no responder y pedir directamente lo que quiero.
Pero el súmmum de esto fue cuando en un autobús de Las Vegas un negro me ofreció el puño para chocar nudillos mientras me decía el "what's up?". Si es que cuando me pongo a integrarme...
Ubicación
Publicado desde Boise, la ocatava provincia vasca. En cuanto escriba sobre SLC y Boise me pongo al día.

Wednesday 20 October 2010

Flagstaff y el Cañón del Colorado

La ciudad
Flagstaff es el típico pueblecito americano. Los edificios más altos tienen como mucho tres plantas; las casas unifamiliares son asitodas de una sola planta, lo que hace que sea un pueblo muy extenso a pesar de tener solo unos 50000 habitantes. Sin embargo en este pueblo no hace falta tener coche. Bueno, para vivir supongo que sí, pero para pasar un par de días se puede hacer todo andando o en los autobuses urbanos que tienen. Los hoteles, albergues, bares y restaurantes están situados en el centro del pueblo, alrededor de la estación de trenes. Lo único que queda un poco a desmano son los supermercados, que están a unos veinte minutos andando los más cercanos.

Por el centro del pueblo pasan la Ruta 66 y las vías del tren. Los trenes de pasajeros pasan una vez a la mañana pero el resto del día están pasando continuamente trenes de mercancias. Aquí los trenes no son electrícos, sino que van con locomotoras diesel, así que sobre las vías no hay cables. Diría que las locomotoras de aquí son más grandes que las de Europa, aunque tal vez sea una percepción erronea por verlas a ras del suelo y no desde un andén de la estación bajo el sol abrasador. Lo que es impresionante son la cantidad de vagones que lleva cada tren; he visto algún tren con tres locomotoras, no sé si para tener más potencia o simplemente porque las están trasladando. También es normal que los trenes tengan una locomotora al principio y otra al final; aquí tampoco sé si la segunda es funcional.

Mi idea inicial era pasar dos noches en Flagstaff. El primer día para asentarme, el segundo para visitar el Cañón del colorado y el tercero para desasentarme, es decir, salir hacia Las Vegas. ¿Por qué en Flagstaff? Pues porque está cerca del Cañón del Colorado (cerca son unos 100 km). Aunque hay varias formas de llegar al cañón, la que me recomendaron era ir con la excursión que organiza el albergue los Lunes, Miércoles, Viernes y Sábado. Sí, mi segundo día en Flagstaff era Jueves, así que no había excursión, pero bueno, como el pueblecito era chulo, pues decido quedarme un día más, y aprovechar el Jueves para visitar el pueblo.

El Jueves por la mañana me di una vuelta por el campus de la NAU. Por si no os habéis dado cuenta, me gusta darme una vuelta por los campuses. De aquí me pasé por el Riordan Mansion State Historic Park. Se trata de la casa de una de las familias más importantes de los inicios del pueblo. Eran dos hermanos que regentaban el aserradero del pueblo. Estaban forrados, así que cuando uno cuidaba del aserradero, el otro se dedicaba a viajar por todo el mundo. La visita a los jardines es gratis, pero la entrada a la casa cuesta 7$ e incluye las explicaciones de un guía. Merece mucho la pena. Las explicaciones se centran por una parte en las vidas de los dos hermanso y sus familias, y por otra parte en la casa en sí. A mí los culebrones no me gustan, pero lo que contaban sobre la casa, construida en 1904 era muy interesante.

La casa fue la primera del pueblo en tener tuberías (esto incluye baños). También tenía electricidad, aunque solo para iluminación, así que cuando aparecieron los primeros dispositivos electrícos tenías que quitar una bombilla y poner un casquillo con el enchufe. También tenían un megafrigorífico con 6 puertas. Por una metían hielo para mantener el fresquito que se supone que tiene que tener una nevera y por otra los comerciantes podían poner la comidalas verduras y demás alimentos. Al estar estas dos puertas fuera, no sé molestaba a la gente del interior. De las cuatro puertas que estaban dentro, por una se accedía al mismo compartimento dónde se habían dejado los comestibles, para distribuirlos entre los otros tres compartimentos.

Los hielos, como todo el mundo sabe, se derretían, y el agua iba a parar a unos depósitos del sótano para ser utilizada en la lavandería. Siguiendo con el agua, junto a la cocina (de leña) tenían una caldera en la que se iba calentando continuamente el agua (por eso se ponía junto a la cocina). Así si en algún punto de la casa se necesitaba agua caliente, pues ahí estaba.

Pero es que además, la casa contaba con un sistema de aire acondicionado. Flagstaff está en arizona, que se caracteriza pos su desierto. Sin embargo, al estar a unos 2000 metros de altitud no hace tanto calor como en el desierto, y la vegetación es más verde. aun así en verano tiene que hacer calorcito. Pues la casa, de dos plantas tenía claraboyas en el tejado, ventanucos encima de las puertas de las habitaciones y un gran agujero entre la primera y la segunda planta que facilitaba la circulación del aire, y mantenían la casa fresquita. Además, la disposición de las ventanas permitían la iluminación de los rincones más insospechados. Había incluso una despensa al lado de la cocina con una ventana que daba a la cocina. sin embargo estaba enfrente de otra ventana que permtía que el sol de la mañana iluninase completamente la despensa.

Como veis una casa muy ecológica construida en 1904, que además tenía un sistema de timbres por todas las habitaciones para llamar al servicio. Si me vengo a vivir a Arizona voy a ver si me dejan vivir aquí.

Emocionado con la visita a la casa ecológica, a la tarde fui al museo de los pioneros. Vaya decepción. Me recordó por qué no me gustan los musesos. Sin embargo, de camino pase por un instituto, y me cuadro un partido de fútbol americano del que pude ver el último cuarto casi completo. Los lugareños recibieron una pequeña paliza.

A la noche me fui a cenar a un bar irlandés de esos que hay en todo el mundo menos en Irlanda. Tenían por lo menos 20 teles, y estaban echando los partidos de fútbol americano de la liga universitaria y de la liga de institutos. Me imaginé a las cámaras de Canal + apuntando al campo de arena de Marias...

Cuando llegué al albergue me encontré con un pequeño problema: para que se hiciese la excursión al cañón del colorado hacían falta cuatro personas, y solo estabamos apuntadas tres. Así que en vez de escribir el blog como tenía pensado, pues me tuve que poner a buscar alternativas. Por eso he tardado tanto en actualizar. Todas las alternativas que vi necesitaban reserva, así que me fui a la cama confiando en que alguien se apuntase a última hora. Sin embargo no hubo suerte. Cuando me levanté a la mañana siguiente seguía habiendo tres personas. El recepcionista del albergue se portó muy bien, y empezó a llamar a otras agencias que hacían excursiones y viajes. Al final fui con arizonashuttle.com. No era tour, simplemente te llevaban al cañón a las 8 de la mañana y te recogían a las 18:15. La verdad es que al final mejor, porque así podías hacer lo que te daba la gana, era más barato (62$ con la entrada al parque) y encima salía una hora antes y podías andar por dónde quisieses.


El Gran Cañón del Colorado
A pesar de su fama, el Cañón del Colorado (que se llama así por el río, no por el estado que es Arizona) no bate ningún récord. Tampoco es el lugar más más chulo que haya visto. Sencillamente es impresionante. Si en el resto del viaje he sacado 1150 fotos, en el cañón saqué 432; no avanzaba nada, cada dos por tres tenía que sacar una foto.
El cañón tiene una longitud de más de cuatrocientos kilómetros, así que como os imaginaréis no lo vi entero. De una orilla a otra hay una media de 16 km, pero para ir en coche hacen falta unas 5 horas. Yo estuve en el lado sur, que es más popular, y la furgoneta nos dejaba en la entrada sur. En esta zona del parque se pueden hacer varios recorridos: el Rim trail sigue el borde del cañón y el resto descienden hacia el río. También hay tres autobuses que van más o menos paralelos al Rim trail y van haciendo paradas en los miradores más típicos.

Yo empcé a hacer el recorrido más puplar, el Bright Angel. En total, para bajar hasta el río son unos 20 kilómetors ida y vuelta y según las guías se tarda entre 6 y 9 horas. Pero por todo el camino y en todas las guías hay constantes avisos desaconsejando hacerlo todo en un día. Hay que tener en cuenta que en el borde se está a unos 3000 metros de altitud, así que se está fresquito. Pero según se va descendiendo la temperatura va aumentando y en verano en el río se puede llegar a más de 40º, además quedando todavía lo peor, subir. Todos los años tratan a gente por deshidratación y también se ha muerto gente, incluso una corredora de maratones. Para hacerlo en dos días la única opción es acampar, y para eso hay que pedir permiso. Pero tiene que ser una gozada pasar la noche ahí.

En el recorrido hay puntos intermedios cada dos kilómetros y medio. Yo hice los dos primeros. No seguí porque quería hacer también parte de Rim trail (el que va por el borde) y en las guías pone que se tarda el doble en bajar que en subir. Esto es mentira. Yo tardé menos en subir que en bajar; claro que al bajar me paraba mucho para sacar fotos y al subir iba a buen ritmo. En cualquier caso no recomiendo a nadie hacer los dos primeros tramoas. O llegáis al tercero, al Indian Garden, o sino como mucho el primer tramo. Personalmente haría sólo el Rim Trail.

Después de subir, me cogí uno de los autobuses y fui al Hrmits Rest, y me hice casi todo el recorrido de vuelta nadando. Para entonces ya estaba atardeciendo y se ve ve como las sombras poco a poco van comiendo el color rojizo de la tierra acentuado por los colores del sol al atardecer. Los mejores puntos para observar esto es desde los miradores donde para el autobús, pero entre medio también hay buenos sitios con la ventaja de que como apenas hay gente se está en silencio y se oye a los animalillos y así. bueno, también los aviones (y no volaban bajo precisamente).

Pues eso, que hay sitios que pueden ser igual de chulos o más (por ejemplo hacer la ruta del Cares). Lo que pasa es que el Gran Cañón es enorme, impresionante.



La gente
Por fin he coincidido con más mochileros. Nada más bajarme del autobús había una australiana y una inglesa que también iban al albergue. Lo mejor de esto es que llamaron al albergue para que mandasen una furgoneta a la parada de autobuses, cosa que yo no sabía, así que me ahorré el viaje a pata.

En el albergue me he dado cuenta de que hay dos tipos de mochileros: los novatillos como yo, que viajamos para ver cosas, y los veteranos como las dos chicas que he coementado. Estos ya no necesitan viajar para ver cosas. No. Esta gente viaja para comentar en los albergues sus viajes anteriores. Yo procuraba madrugar para aprovechar la luz del día (de esto hago un apunte luego), pero los mochileros veteranos se levantaban para las nueve, y porque el desayuno se terminaba a las nueve y media. El primer día, que estuve por el pueblo fui a comer al albergue, y ahí estaban. Había una canadiense que decía que había ido a hacer senderismo y a andar en bici. Y la inglesa, que ya había estado con anterioridad en el cañón iba a ver Sedona, el típico escenario de las películas del oeste (que yo no vi). Supongo que estarían en su día de descanso, pero es que el último día, que yo cogía el autobús a la una y media del mediodía, ahí estaban a las once comentando los sitios fantásticos dónde habían estado.

Pero el campeón en este aspecto era un tipo que compartía cuarto conmigo. el primer día estaba metido en la cama a las siete de la tarde. Además luego seguía mis horarios; el día que yo madrugué el madrugó y el que yo me levanté tarde el se levantó tarde. Además siempre que pasaba por el albergue, ahí estaba el tío. De todas formas este no tenía mucha pinta de mochilero. Parecía más bien como si estuviese estudiando allí y viviese en el albergue. Encualquier caso un tipo muy largo que tiene bastantes boletos para llevarse el premio de friki del post.

En la furgonetilla en la que fui al cañón conocía a otros dos mochileros. estos eran de los novatos, ahí estaban a las ocho de la mañana en la estación del tren para coger un autobús (sí, tren y autobús). Había un portugués que se llamaba Vasco, diseñador gráfico que acababa de terminar unas prácticas en Nueva york y estaba haciendo algo parecido a mi viaje, pero él con el tren, y una chica de Seattle que se llamaba Kristina. Kristina era otra afectada por la falta de gente para hacer el tour organizado, y al parecer optó por la misma solución que yo. Cuando le pregunté a que se dedicaba me dijo que había estudiado "películas" (film). Como no sé muy bien que carrera es eso le pregunté a ver si eso era para ser actriz o era otra cosa, a lo que me respondió afirmativamente. Segundo castigo del Karma en este viaje. El caso es que se quiere dedicar a otra cosa, pero que no lo tiene muy claro. Para aclararse estaba haciendo un costa a costa, pero en la dirección contraria a la mía (para los más puristas, en la misma dirección pero sentido contrario).

En el cañón nos fuimos los dos Vascos a hacer la ruta del Bright Angel. Kristina no tenía muchas ganas de andar subiendo y bajando, así que se fue al Rim. Resulta que Vasco también iba el sábado a Las Vegas, así que yo ya pensaba que iba a tener un amiguito para hacer las apuestas, pero resulta que Vasco solo tenía intención de llegar a las tres de la mañana, pasar la noche visitando la ciudad y coger un tren a la mañana para ir al parque de Yosemite, cosa que no cuadraba con mis planes. Cuando llegamos al segundo punto del camino nos separamos; él fue al Indian Garden y yo al Rim. A ver si consigo su cuenta de flicker, que tenía pinta de sacar mejores fotos que yo. Por cierto, que el tipo este me cazó el acento en cuanto abrí la boca, algo que no me ha pasado mucho en este viaje. De hecho cuando me atienden hispanos en alguna tienda, tras hablarles en castellano me han respondido en inglés. Si les hablo en inglés ni se enteran. Sabrán que soy guiri, pero no de donde Si es que me integro de bien...

Lo mejor
El bocadillo que me comí cuando subí del descenso al Bright Angel. De todas formas no supera a la Coca-cola que me bebí cuando llegué a Caín, en la ruta del Cares.

Lo peor
No haber ido a Sedona y haberme enterado de que en Nueva Orleans tenía que haber hecho una excursión a los pantanos para ver los caimanes. Aunque bueno, ya vi un par de caimanes albinos en el acuario de Atlanta.

Lo que he aprendido
Que en altitudes elevadas, al haber menos oxígeno en el aire te emborrachas antes y las resacas son peores. Afortunadamente no lo he aprendido en base a la experiencia.


El personaje más friki
A pesar de que había otro candidato por ahí, vamos a darle el honor a un personaje que vi en el campus andando en monociclo. Sólo falta que se haya compilado un Linux From Scratch.

Miscelanea
Las zonas horarias y el cambio de hora
Según el mapa que tengo en una de las contraportadas de la guía, Arizona está en la zona horaria de las rocosas, es decir, una hora menos que de donde yo venía, Oklahoma. Sin embargo en el viaje, el móvil me preguntó si quería actualizar la hora dos veces, en vez de una como yo esperaba. Le pregunté a google y me confirmaba que en Arizona era igual que en el Pacífico. Al final me enteré de que en Arizona no hacen el cambio de hora de verano. Como consecuencia, amanecía una hora antes y para las 18:00 ya estaba completamente oscuro.

Ubicación actual
Por poneros un poco en situación, después de Falgastaff he pasado dos noches en las Vegas y ahora estoy en Salt Lake City. Mañana voy a Boise, Idaho. Lo que pasa es que no doy abasto para escribir los posts al día.

Monday 18 October 2010

Ruta 66

La Ruta 66 es una carretera mítica en los Estados Unidos. Es la carretera que une Chicago con Los ángeles, atravesando medio país. Tiene varios sobrenombres, como la carretera madre o la calle de Estados Unidos y aparece en muchas películas y libros. Debido a su fama es la ruta utilizada por muchos turistas para atravesar el país, especialmente moteros. Realmente la ruta 66 ya no existe como tal; ha sido sustituida por otras autopistas y carreteras mejores y más directas, pero en muchos estados los tramos de la ruta 66 se han convertido en carreteras locales o estatales.

Pues el autobús que cogí en Oklahoma para ir a Flagstaff es el autobús de Greyhound que cubre la Ruta 66. A mí me costó unas 18 horas llegar de Oklahoma City a Falgstaff y todavía quedaban otras 8 horas hasta llegar a Los Ángeles.Según la página de Greyhound, el viaje completo desde Chicago son casi dos días enteros. Aun así, de todos los autobuses que he cogido este ha sido sin duda el que más pasajeros tenía. Aunque es cierto que había mucho cambio de pasajeros, había unos cuantos que ya estaban en el autobús cuando subí yo y que se dirigían hasta California. La verdad es que no me lo explico, porque un billete de avión, así sin buscar mucho costaba sólo 25$ más que el billete estándar de Greyhound entre Chicago y Los Ángeles, y el vuelo tardaba sólo 8 horas con una escala. Supongo que utilizarán los descuentos por compra anticipada y cosas así para que les salga rentable.

Por si alguien se pregunta por qué yo viajo en autobús y no en avión, os recuerdo que me compré el "Discovery Pass", que por unos 450$ te deja coger todos los autobuses que quieras en un mes. Para que calculéis si merece la pena, el viaje del que hablamos, Oklahoma-Flagstaff, cuesta 128.48$ con la tarifa web, y el de Washington-Atlanta cuesta 98.56$, también tarifa web. Aunque es posible obtener precios más baratos reservando con antelación, antes de venir hice cálculos y me hubiese salido por un precio similar, y además no tendría la flexibilidad que tengo ahora. Por si alguien tiene interés, Amtrak, la compañía de trenes, tiene un billete similar a este, aunque limitado a 12 viajes en un mes. Si a alguien le parecen pocos viajes (12 en un mes), que piense que es practicamente estar viajando uno de cada dos días. Yo tengo planeados once viajes.

La ciudad
Obviamente, en este post no voy a contaros nada sobre la ciudad, aunque si que puedo describir el autobús: 55 plazas, con un baño al fondo y aunque no tiene puerta trasera tiene un par de asientos reservados para sillas de ruedas. Si no están ocupadas, tienen asientos normales, aunque con más espacio para las piernas que el resto. Obviamente son los primeros que se ocupan. Pero vamos, lo que viene siendo un autbús normal y corriente. Sin embargo entre los pasajeros había gente muy peculiar.
Igual a alguien se le ocurre que podría contar cosas del paisaje, así que voy a hacer un resumen. La mitad del vaije me lo pasé durmiendo, y además era denoche, así que no se veía mucho paisaje. La otra mitad del viaje pasamos por el desierto de Nuevo México y Arizona. Si alguna vez habéis hablado con alguien que ha hecho el camino de Santiago francés, igual os ha dicho que es desesperante cuando ves un árbol a lo lejos y trás andar durante dos horas comprobar como el árbol sigue estando en el horizonte. Pues esto es igual, sólo que en vez de ir andando vas en autobús, así que por lo menos no te cansas.

La gente
De entre todos había una familia que me llamó mucho la atención. La madre era latina y el padre el típico quarterback echado a perder. Viajabn con dos niñas, una de unos cuatro o seis años y un bebe. Me costó mucho llegar a la conclusión de que era una familia completa. Al principio parecía que la madre viajaba con las niñas y que el tío simplemente charlaba con la madre. Empecé a sospecharlo cuando al subirnos al autobús, el tío cogió un momento al bebé mientras la madre acomodaba a la niña. En estas el tío le suelta que haber si va a tardar mucho, que no puede aguantar al bebé todo el viaje. en cuanto se lo devolvió a la madre, el tipo metió la mano a la mochila, sacó la PSP y se puso a jugar. En el resto del viaje hizo alguna más de estas. Vaya campeón, este si que tiene los pantalones en la casa. Además jugaba con el volumen a tope, se oía por todo el autobús el motor del coche de su juego de carreras. Ya no es sólo que después de cada parada una de las muchas normas que recuerda el conductor es que se usen ese tipo de dispositivos con auriculares y a un volumen que solo lo oiga el interesado, sino que además eran las 12 de la noche...

Otra cosa que me resultó graciosa es que en cada trayecto siempre quedaban dos o tres sitios libres. Casualmente estos sitios estaban al lado de los gordos. Va a resultar mejor truco que el de poner la mochila. Pues una de estas pasajeras con sobrepeso tenía que ir al baño (que ya he dicho que está al fondo del autobús). Pues resulta que la madre hispana de la que he hablado antes tenía la rodilla o el pie algo salida hacia el pasillo. La pasajera que se meaba debía de ser de Washington, porque en vez de tratar de pasar por encima o esquivarla o empjarla sutilmente, se quedó parada esperando a ver si la madre reaccionaba. Como la madre estaba a sus cosas no sé enteró, y la pasajera todo indignada grita un "Excuseme!!" (osea, ¡Perdone!). En fin, así está, que no hace ejercicio ni para levantar la pata para mear.

En episodios anteriores ya he contado como en muchas paradas es encesario que se bajen todos los pasajeros, y luego suben primero los que ya estaban (porque les han dado un "Reboarding pass" (pase de reembarque) y luego los pasajeros nuevos. Pues a un señor no le dieron su reboarding pass, y a pesar de que le enseñaba al de los tickets su billete de que venía de la parada anterior, al tío no le servía y le hizo salirse de la cola. Como en vez de ponerse en la cola de pasajeros nuevos, que todavía estaba casi sin formar, se fue a reclamar al que vendía los billetes, pues se quedó sin "reboarding pass" y encima se subió el último. Que cara puso el tipo cuando el único sitio libre era al lado de una señora que ocupaba su asiento y parte del otro. El tío no daba crédito. Para rematar la cosa, su asiento estaba sucio de algo que no parecía muy agradable. Era sólo eso, apariencia, porque realmente era que el asiento estaba desgastado, pero solo sirvió para desquiciar más al tío. Se bajó en la siguiente parada, no sé si porque era su destino final o porque se cogió un taxi.

Lo mejor
Son 18 horas metido en un autobús. No hay nada que pueda ser "lo mejor".

Lo peor
Que me tocó pasillo todo el rato, aunque afortunadamente mis compañeros nunca ocupaban parte de mi asiento. Además como me subí de los últimos, pues me tocó sentarme bastante atrás. Nunca le había dado mucha importancia a esto, hasta que caí en la cuenta de que la cantidad de gente que pasa por tu lado para ir al baño es mayor cuanta más gente tengas delante. Si no veis el inconveniente de esto, seguid leyendo.

Lo que he aprendido
voy perfeccionando mi técnica para dormir en los autobuses. La postura que mejor resultado me da es con el asiento sin reclinar, la cara apollada en la palma de la mano y el codo en el reposabrazos. Esta postura tiene una pequeña pega; cuando el brazo donde apollas la cabeza está en el reposabrazos del pasillo, se te queda la cabeza ligeramente salida hacia el pasillo, siendo arroyada cuando la gente va al baño. ¿Veis ahora el inconveniente de estar sentado por atrás?

El personaje más friki
Después de cada parada, todos los conductores dan una pequeña charla donde cuentan las promas paradas, la hora aproximada de llegada, porque vamos con media hora de retraso y las normas, que son básicamente no funmar, no beber bebidas alcoholicas, no llevar drogas ni armas ni nada así. Es curisoso que no dicen nada sobre la comida, y la gente se monta con todo tipo de platos de comida para llevar.

Pues el condctor que hizo los primeros trayectos debía de tener complejo de showman o similar. Metía chistecillos en sus avisos y repetía los comentarios cuatro o cinco veces para que nos quedase todo bien claro. Además tenía una voz bastante peculiar. La primera vez resultaba algo gracioso, pero el tio terminó siendo un cansino. Tras el cambio de conductores, el nuevo debía de conocer esta faceta de su colega, porque dijo: "Voy a ser breve. Siguiente parada Flagstaff. No se puede fumar ni beber alcohol ni llevar drogas ni armas. buen viaje".

Saturday 16 October 2010

Oklahoma City

Se me acumula el trabajo... Ya he estado en Oklahoma, Flagstaff y el Gran Cañón y todavía no he publicado nada de esos sitios.

La ciudad
Oklahoma City es una ciudad que está a mitad de camino entre Nueva Orleans y Flagstaff. Había otras opciones; podía haberme quedado en Dallas, en Alburqueque o en Amarillo (es muy gracioso oir como la gente de por aquí pronuncia los nombres españoles, especialmente "Amarillo". Claro que ellos también pensarán que mi pronunciación es rara.). Al final opté por Oklahoma City por la sencilla razón de los horarios. A Oklahoma City llegaba a las 10 de la mañana y salí de allí a las 9 de la noche. En todos los demás destinos o bien llegaba de madrugada o salía de madrugada. De lo que no me di cuenta es de que tenía un trasbordo en Dallas en el que tenía que esperar unas cuatro o cinco horas...

Oklahoma es famosa por dos cosas, por un atentado con bomba que hubo en 1995 y por la conquista del oeste. He buscado imágenes sobre el atentado y la verdad es que el edificio se quedó hecho polvo. En el lugar donde estaba el edificio ahora hay un monumento-recordatorio, un parque con una silla por cada una de las victimas. Además hay un árbol que sobrevivió al atentado, y le han puesto una plaquita. El caso es que entre este atentado y el 11S, enOklahoma City se han vuelto un poco paranoicos y han quitado todas las taquillas de la ciudad. De todas las estaciones de Greyhound que he estado, esta es la única que no tenía taquillas. Así que me pasé el día entero con la mochila a cuestas.
Para colmo, en Oklahoma City es prácticamente imprescindible tener un coche. De lo poco que hay para ver, la mitad de las cosas están a 8 kilometros o más del centro. Empecé a ir al museo de historia de Oklahoma, que está al lado del capitolio, pero me rajé a la mitad. Esto no me importó mucho, porque a mí los museos tampoco es que me apasionen, pero si que quería haber ido a comer a un restaurante típico de los años 50, que estaba en la ruta 66. El caso es que volví al centro donde se podía ver el monumento-recordatorio a las víctimas del atentado, la zona comercial, con un par de rascacielos y el Bricktown.

El Bricktown es una zona de la ciudad que recibe su nombre porque se ven los ladrillos de los edificios (Brick es ladrillo en inglés y town significa ciudad: bricktown->ciudad de ladrillo). Anteriormente debió de ser una zona industrial o algo así, porque todos los edificios tenían pinta de almacenes. Sin embargo los han reformado y ahora es una zona llena de restaurantes, bares y jardines. Además hay un canal que atraviesa toda esta zona donde se puede hacer un bonito paseo para bajar la comida. También es posible recorrerlos en "aqua-taxis", unas barquitas que recorren todo el paseo. Yo como estaba super cómodo con mi mochilón a cuestas decidí hacerlo andando...
Al final del canal se llega al monumento a la conquista del oeste. Si estáis pensando en vaqueros y tiros y cosas así, no tiene nada que ver con eso. Allá por el siglo XIX, el gobierno de los Estados Unidos tenía un montón de tierras en el territorio de Oklahoma que quería colonizar. Como no sabía muy bien como repartir las tierras, pues las dividió en parcelas, les puso un número a cada una y organizó una carrera. Todos los colonos que querían su trocito de tierra estaban con sus caballos, bicis, carros y demás vehículos de la época, y en cuanto sonó el cañonazo salieron todos corriendo a por su parcela. Esto se ve en la película "Un horizonte muy lejano" (Far and Away) y también salió en uno de los libros de "¿Dónde está Wally?". Ahora que somos más civilizados, simplemente damos nuestros datos y esperamos a que una bolita que sale de un bombo nos diga si nos ha tocado una casita o no.

En el Bricktown también está el estadio de los Readhawks, el equipo de béisbol de la ciudad. Después de entrar y sacar un par de fotos me dijeron que no podía estar dentro, que estaba abierto sólo para temas de mantenimiento. El caso es que yo me fui con mi foto.
La gente
En un día en Oklahoma City no me dio tiempo a conocer a mucha gente. Caminando por el Bricktown un lugareño me empezó a contar que el también viajaba mucho de mochilero, y que si quería me podía unir a él y sus amigos que iban a cenar algo en un bar del Bricktown. Yo pasé de su oferta, y fue un acierto, porque así descubrí el "Zio's Italian Kitchen", un restaurante italiano situado al comienzo del canal, en una segunda planta.
Se nota que los camareros tienen que ganarse la propina; estos si que hacían buen servicio, y sin nada de protocolos ni leches. Todo atención y amabilidad. Además uno de los camareros que me atendió era hijo de catalanes emigrantes, así que estuvo practicando castellano conmigo un rato. Luego volvimos al inglés porque su compañero no nos entendía. La duda que me ha quedado es porque atendían de dos en dos.

Lo mejor
La cena en el Zio's

Lo Peor
Al pedir el billete para ir a Flagstaff, el taquillero murmuró algo de lo que sólo entendí "Amarillo", una ciudad en la que tenía que hacer escala. Al mirar el billete vi que solo tenía billete para ir hasta dicha ciudad, en vez de a Flagstaff, así que le reclamé al taquillero. Entre que el tipo tenía un acento bastante raro y que le hablaba al cuello de su camisa, no me enteré de lo que me dijo, así que opté por preguntarle al del check-in. Cuando el tío me dijo que con ese billete solamente podía ir hasta Amarillo, y no a Flagstaff me volví a dirigir al taquillero, sin mucha esperanza de entenderle. Antes de que me atendiese el poli que andaba dando vueltas por allí me dijo que tenía que coger otro billete en Amarillo. Me pasé todo el viaje a amarillo pensando si tendría tiempo para coger el billete en el tiempo del descanso, y encima me quedé sin "Reboarding Pass".

Lo que he aprendido
A situar el "Oeste" en el mapa. Antes siempre asociaba las películas del Oeste a la costa Oeste de América del Norte, pero no hace falta irse tan lejos.

El personaje más friki
En la estación de autobuses había un tío vestido de cowboy, con espuelas y todo. también habia un tío que había ido a Oklahoma City al médico y una tía que hablaba con él. Creo que eran "homeless" o así; en cualquier caso resultaban muy curiosos. Luego apareció otra tipa que no tenía billete, así que en teoría no podía estar en la estación de autobuses; o estás en la cola de información y/o compra de billetes o tienes billete, para evitar vagabundos.

Miscelanea
Los coches
Ya sabía que en Estados Unidos tener coche es prácticamente imprescindible. De hecho inventaron los auto-cines y el drive thru del McDonalds para no tener que bajarse del coche. Pero me hizo bastante gracia ver que también usan este sistema para devolver los libros a la biblioteca. Al final eso de "coger el coche hasta para ir a por el pan" va a ser algo normal.
Las vacas de Bilbao
¿Os acordáis que hubo una época en la que Bilbao estaba lleno de vacas de colores? Pues a esas vacas les ha salido chepa y ahora están todas en Oklahoma City.